Heraldo de Aragón.
Un reciente estudio del Imperial College de Londres revela que la psilocibina, principio activo de diversos hongos alucinógenos, reduce la actividad de zonas centrales del cerebro, lo que provoca un estado de cognición sin restricciones, desmontando el falso mito de la "expansión de la mente".
Aunque la percepción del riesgo de consumir estas sustancias es baja, los médicos advierten de que un empleo puntual puede desencadenar una intoxicación grave, pudiendo adelantar la aparición de una enfermedad psicótica, incluso resultando mortales.